Cualquier ciudad del mundo: cinco poemas de Verónica Delgadillo Vargas
JUICIOSA
Debo tener buen juicio dicen debo limpiar el pis debo lavar la ropa dicen los platos, las tazas que no ensucié.
No hice nada en estos días días de equivocación dicen.
No soy una hembra perfecta digo no me preocupa serlo no quiero serlo.
Es mi tiempo un tiempo para propiciar las coordenadas exactas seguras perfectas donde calmar mi celo.
O QUIZÁS ME EQUIVOCO
Es la víspera no sé si debo buscarte no sé si debo llamarte desde acá (donde se vivió) arengarte no sé dejarte odiarte. Sin vos soy un par de ojos abandonados ni siquiera los míos, cualquiera
un par de ojos abandonados, decía
abandonados en la plaza de cualquier ciudad del mundo.
VII.
El aire es
aquella ciudad
a la que vine por primera vez
muero años atrás
¿dónde?
¿dónde estoy?
15
“ hasta que la muerte no sé pare”
Matías Lockhart
Ya no soy yo el frío ha roído mis huesos este vacío es serio.
¿Puedes venir?
Hoy en la mañana vi pañuelos elevándose en la calle desperté con cicatrices regadas por mi cuerpo.
Tengo miedo algún miedo
no me siento y no me sé.
Estoy al revés estoy mal hecha.
Alguien tiene que venir ahora a barrer esta casa sin orillas.
NO LLUEVAS MÁS
Soñé con vos hace unas noches con tu cabello
-específicamente-
lo tocaba y entre mis dedos se hacía aire y remolino luego trazo minúsculo anudado girando yo me dejaba caer mientras lo desataba vos asomabas incesante pródigo un hombre de miel atravesando mis pestañas
tipo 06.45 tus dedos anunciaban la mañana y mientras la ultraderecha llegaba al poder en Brasil mitad de mí decía
¡qué grave! ¡qué grave!
esto de oficiarte cada mañana y cada noche inventando la puerta por donde entrará la tormenta que desatarás
existiendo.
ESTA TARDE
El tráfico me ofrece una pausa me invita a cruzar el concreto a atravesarlo
serpenteante
hacia ningún sitio
ningún sitio bien podría ser -exactamente- nuestra casa
y qué.
Verónica Delgadillo Vargas: (Santa Cruz de la Sierra, Bolivia) Comunicadora Social y Poeta. Colabora en Revistas literarias de circulación nacional y en Revistas internacionales digitales. Parte de su trabajo aparece en antologías en Argentina, Bolivia, Venezuela, Colombia, Chile, Perú y Ecuador. El 2019 obtiene el segundo lugar en el XLVI Concurso Municipal de Literatura Franz Tamayo. Categoría Poesía con su obra 37 armónicos para una fuga (2019). Ha publicado Las tejas de Job (2013) Mención de Honor en el Premio Nacional de Poesía Yolanda Bedregal 2012 y Ausencia del árbol (2018).
mbia, Chile, Perú y Ecuador.