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Duelo en código Malware: libro de Rafael Sanz Sierra (selección)

TAXIDERMISTA DE POETAS

Poesía es surfear el bajo Ebro en una tabla con forma de catedrático esclerótico, deslizándose sobre olas contaminadas y lucios de metro y medio con 170 dientes. Poesía es surfear el bajo Ebro desde Zaragoza hasta el mar de Aragón, mientras veo como cierra cada maldita multinacional del planeta y leo “ El Gólem” en el canalillo de Scarlett Johansson. Nadie, mas que yo, ha surfeado el bajo Ebro y ha encontrado arapaimas del cretácico conspirando para derrocar al rey e instaurar la sexta república anarco-punk.

EL ACTO DE CAGAR

Estoy cagando y me veo la polla y me digo: qué raro es todo. Las baldosas. Los zapatos. Los calzoncillos negros. El papel higiénico. Qué raro es todo.

Qué feos eran Jean Paul Sartre y su novia.

BILL GATES EN LA NARCOSALA

Enseñaba Java a los mapaches, así construían unas madrigueras de puta madre.

La poesía es el negocio de la basura. Las miasmas que salen de un mono maldito llamado hombre.

Solo admito consejo, de mi tortuga Einstein, y de yonkis terminales. Lo que diga Bill Gates me la suda.

Yo me limito a echarme la siesta y a esperar que se hunda el capitalismo.

Elena de Troya se puede ir mil veces a la mierda; porque sí, porque lo digo yo; y Agamenón también.

Todo esto ya lo decía el maestro Chamfort, yo soy solo un linotipista.

Las bibliotecas arden de maravilla, y los poetas rociados de gasolina aún mejor.

TRACIOS EN LAS ISLAS CÍES

Tras cinco Iron-Man consecutivas me reuní con Caballo Loco y Buffalo Bill y nos fuimos a despellejar el capitalismo. A las afueras de Roma encontramos a Julio César pidiendo limosna y le dimos seis millones de euros y seis patadas en la cabeza. Un ejército de minotauros capitaneados por Google nos pisaba los talones, por lo que pedimos ayuda a Aníbal y sus mammuts; les preparamos una emboscada en la Sierra de la Culebra y los matamos a todos. Ganamos la guerra al capital nombrándonos emperadores con mucho fasto. A las dos horas, dimitimos, y nos largamos a Las Palmas de Gran Canaria a disfrutar de los beneficios de paro masivo. Conocimos al gran Leopoldo María Panero prófugo del manicomio del Dr. Inglott que nos alojó con él en las ruinas de la catedral de Santa Ana. Allí vivimos hasta que nos declararon personas non gratas y tuvimos que emigrar los cuatro, en patera, a la ciudad autónoma de Ceuta, donde nos acogió el tercio de la legión sin poner muchas pegas.

PARÁLISIS ESQUIZOIDE TRANSVERSAL

Nos travestíamos de Madame Bovary y salíamos por las discotecas a pillar el SIDA. Mientras unas cosas y otras echábamos arsénico a los cubalibres; viendo a la peña ponerse morada y revolcarse por el suelo les escribía poemas con toda mi buena fe. Yo solo tenía 14 años, no sabía casi lo que hacía. No era bienvenido en el colegio. Ni en mi casa. Así que con alguien lo tenía que pagar.

LAST RIVER ( RÍO EBRO II )

Mi mayor ocupación es ver a los siluros del Ebro comer palomas. Mi carrera profesional es una puta sin bragas tomando el sol en la sucia ribera del Ebro.

Bueno, todavía queda vida en el río. Hay cormoranes, ratas, siluros y patos. Parece ser que estos bichos aguantan la mierda. Árboles también hay. Y gaviotas.

No sé qué hacen aquí las gaviotas. El planeta está desquiciado. Los monos sin pelo tienen la culpa. Eso si,no esperes ver en el Ebro ranas, sapos, culebras o truchas. La contaminación ha podido con ellos.

Mi carrera literaria son dos putas de rotonda con el coño infectado. El futuro es el coño, muy húmedo, de Rihanna bañado en Moet Chandon.

Hoy tengo poca prisa. Estoy pescando con un grupo de parados de larga duración. Pescamos carpas y nos descojonamos de la sociedad de consumo. Benditos los días en que no te ataca la prisa, y observas tranquilo las aguas correr, hasta que un siluro de 80 kg abre su bocaza y se zampa dos palomas de una vez.

EL OUTSIDER ( ORGULLO INDIE )

Somos la vanguardia. Abrimos brechas en el flanco enemigo. Acometemos misiones suicidas. Demoleremos la literatura y construiremos una nueva. No nos dan premios. Nos la suda. Vivimos al margen, en el underground. Somos independientes. Somos beatniks, vagabundos del Dharma. Somos forajidos. No somos funcionarios ni catedráticos ni doctores. Huimos de los academicistas como de la peste. Estamos fuera de la ley, al margen de modas y tendencias. Escribimos lo que nos da la gana. Versos a sangre y fuego. Somos la mierda cantante y danzante del mundo.

UNA HOSTIA DE DONOVAN “RAZOR“ RUDDOCK

La sangre brotaba a chorros en el quinto asalto contra Mike Tyson. Yo había apostado hasta la camisa. Despejamos la incógnita de la derivada inconsciente asociada a la demanda agregada. El demonio del ring supuraba veneno envuelto en el holocausto del lenocinio. Tres dogones rezaban al absurdo usando el cálculo infinitesimal. Los negocios sucios se llaman Don King. El conteo nos llevó a Las Vegas; enganchados al juego palmamos 67.000 dólares a la ruleta y 23.000 al Black Jack. Felicité al Tío Sam y a los Austrias con nitroglicerina en la sopa. La vida es un gancho al hígado. Todas las mañanas saludo al suicidio. Las armamentísticas se frotan las manos. El dinero se llama Exxon Valdez. Veíamos pelícanos cubiertos de chapapote. Cien veces me he arruinado con esto de la poesía. Las putas ya no me fían. Negocio con el pesa-nervios. Soy un broker demente. Soy un cero absoluto. Soy el rey de la lisergia. Destruyo los altos hornos.

KIDROCK VS EMINEM

La basura blanca sale de las caravanas, con 180 de C.I. y ojos de demonio. Aquí estamos, para hacer trizas todo lo establecido. Una preciosa flor de destrucción ilumina nuestro incierto camino. Nos carteamos con Unabomber y con Charlie Manson. Somos unos chavales estupendos, dos superclase fuerasdeserie culosdemalasiento, demonios sin causa recién salidos de los suburbios de Detroit (Michigan). Los asteroides inteligentes compran estupefacientes en Livernois Avenue, meándose en la boca del gobernador. Slim Shady tiene los días contados porque le gusta calentarse con bidones de gasoil y hacer estructuras gramaticales con el “Tratactus” de Wittgenstein tiroteado en los grandes lagos. Nuestra vida son conciertos salvajes de costa a costa 38 haciendo vibrar a rednecks desquiciados quebrando la ley y el orden del congreso y del senado, desafiando las buenas costumbres del Homo Sapiens, elevando a la novena potencia el insulto y la descalificación en las arenas y en los ríos de las garras ensangrentadas de un oso grizzlie.

PERROS ANTICONSUMO

Aunque vayamos vestidos con harapos somos la élite de la humanidad. Somos los epígonos de Cioran de Diógenes de Sócrates de Beckett. Nos odia la burguesía la clase media los millonarios los obreros los intelectuales. Por fin se ha producido la evolución psicológica. Detestamos el consumismo. Acampamos en las orillas del Mar Muerto. Solo comemos escarabajos y sal. Estamos listos para crear nuestra realidad y la hemos creado. Preferimos un burro a un Ferrari. Preferimos un tipi a un loft. Somos los nuevos hombres. 3, 2, 1, 0. La inversión de valores ha comenzado.

de Duelo en código Malware

Ediciones Oblicuas

2018

Rafael Sanz Sierra (Zaragoza, 1975). Diplomado en ciencias empresariales. Ha publicado “Gotas de Ácido” (Ediciones Oblicuas, 2012), “Manifiesto Underground y otros poemas insidiosos” (La Herradura Oxidada, 2012) y “Duelo en código Malware” (Ediciones Oblicuas, 2018). El 2019 fue finalista en el XIV Premio Internacional de Poesía Ciudad de Torrevieja .

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